La clave de la regeneración de extremidades podría estar en el ADN de los lagartos

Los lagartos poseen una cualidad que en sí misma es una maravilla de la naturaleza, ya que son capaces de regenerar su cola después de perderla. De ese modo hacen creer al depredador que la presa sigue atrapada, mientras ellos escapan en busca de refugio. Luego puede crecer una nueva cola en cuestión de unos tres meses, con cartílago en lugar de hueso. Ahora los científicos investigan el ADN de estos reptiles para determinar si esta curiosa habilidad puede ser aplicable a los seres humanos para regenerar las extremidades perdidas. Suena a fantasía hoy por hoy, pero la ingeniería genética seguro que nos va a deparar muchas noticias positivas con titulares parecidos en las próximas décadas.

LagartoOcelado

En concreto se trata de un equipo de investigadores de la Universidad de Arizona el que ha logrado secuenciar el ADN de los lagartos para desentrañar el modo en que regeneran su cola. Más concretamente, de la especie de lagarto Anolis Carolinensis. Quién sabe si este pequeño reptil guarda el secreto que puede mejorar enormemente las condiciones y la esperanza de vida de millones de personas en todo el mundo que han sufrido accidentes o han nacido con malformaciones.

Se cree que de tener éxito con estas investigaciones, las aplicaciones pueden ser útiles para regenerar extremidades amputadas, así como para corregir lesiones de la médula espinal y enfermedades como la artritis, así como para lesiones o defectos de nacimiento. Aunque para eso primero hay que empezar a aplicar las investigaciones en humanos, así que no estamos hablando aún de un horizonte a corto plazo, ya que de momento la investigación solo puede ser aplicada con lagartos.

Kenro Kumusi, profesor e investigador del equipo responsable de este proyecto científico, resume de este modo la importancia de su trabajo: «siguiendo la receta genética para la regeneración que se encuentra en los lagartos, y luego aprovechar esos mismos genes en las células humanas, podría ser posible regenerar nuevo cartílago, músculo, o incluso la médula espinal en el futuro». No estamos hablando pues de cualquier cosa, sino de una auténtica revolución en el campo de la medicina, ante cuyas puertas podemos estar ahora mismo sin saberlo.

ARTICULOS QUE PODRÍAN INTERESARTE

Comparte este articulo

Más historias